domingo, 30 de agosto de 2015

Hasta luego


Las despedidas nunca se le dieron bien, siempre le faltaba algo que decir pero que en el momento nunca le salía. No era agradable despedirse de gente a la que querías tener cerca todos los días, 
pero como siempre pasa nunca se tiene lo que se quiere. 

"¿Cómo evitar el sufrimiento de un adiós? " pensó y su cabeza rápidamente le contestó "Decir un hasta luego que así duele menos".

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